Básicamente, creemos que no podemos ayudar a las personas a gestionar su bienestar a menos que seamos fiables y dignos de confianza, y actuar desde la ética respaldará esa confianza. Esta visión se basa en tres fundamentos que explican la importancia de la ética en lo que hacemos.

Por qué la ética es importante para nosotros

En primer lugar, la ética es intrínseca a las cuestiones de bienestar y a los comportamientos saludables, especialmente cuando se dan consejos y recomendaciones. Aunque nos aseguremos de que nuestras recomendaciones están basadas en evidencia, habrá ocasiones en las que la respuesta “correcta” no siempre sea obvia.

Esto no se debe a que la evidencia sea incorrecta, sino a que las personas pueden tener prioridades contrapuestas. Por ejemplo, a la hora de decidir si recomendamos actividades que favorezcan el bienestar a largo plazo (como hacer algo de ejercicio después del trabajo), u opciones que pueden tener beneficios a corto plazo (como ir a casa y ver tu programa favorito después del trabajo).

Aunque puede haber opciones que combinen lo mejor de las dos (ver el programa mientras haces ejercicio), o incluso se pueda argumentar que, con el tiempo, esas opciones puedan equilibrarse, habrá ocasiones en las que Koa Health tendrá que elegir qué recomendar, cuándo y por qué, y debemos entender los valores éticos que sustentan esa decisión.

En segundo lugar, para poder ayudar a las personas de manera eficaz, necesitamos poder acceder a grandes cantidades de datos. Obviamente, esta amplia variedad de datos es muy personal y sensible porque, de no ser así, no podríamos ofrecer el apoyo altamente personalizado que pretendemos garantizar.

Para acceder a estos datos personales, debemos ganarnos la confianza de las personas. Actuar desde la ética y hacer las cosas correctamente es un paso en esta dirección.

Por último, pero no por ello menos importante, sabemos que las personas exigen cada vez más que la tecnología se desarrolle e implemente de manera ética y fiable. Lo sabemos por los médicos con los que trabajamos, por ejemplo, cuando insistían en que les explicásemos cómo funcionan nuestros algoritmos predictivos.

También se puede deducir de las tendencias generales sobre la confianza. Por ejemplo, según una encuesta realizada por Rock Health en 2018, solo el 11 % de las personas estaría dispuesto a compartir sus datos de salud con una empresa tecnológica.

La definición de salud

El objetivo de Koa Health es mejorar la salud de las personas. Así que es importante saber qué entendemos por salud. Compartimos la definición de salud de la Organización Mundial de la Salud: un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solo la ausencia de enfermedad o dolencia¹.

Claramente, esta definición no solo tiene en cuenta la esperanza de vida, sino que nos obliga a pensar en el bienestar general, en los síntomas y en los problemas.

Para tener una idea general de la salud de una persona, hay una serie de medidas como el año de vida ajustado por calidad (AVAC) o los años de vida ajustados por discapacidad (AVAD). Koa Health sigue investigando para saber cuál de ellos conviene usar.

Esto no significa que no estemos midiendo el estado de bienestar de nuestros usuarios, sino que nos enfocamos en las medidas relacionadas con los desafíos específicos con los que se encuentran nuestras apps, por ejemplo, medidas de estrés, depresión, ansiedad, etc.

El papel de la felicidad

En términos de bienestar, la evidencia emergente en la ciencia cognitiva es que las personas le priorizan su felicidad. Así, la felicidad se considera una señal mental que nos indica que un comportamiento o experiencia es beneficiosa y debe repetirse. Con la tristeza pasa lo contrario.

La felicidad se puede dividir en dos partes: placer y propósito². Mejorar la salud de uno mismo suele encajar más en la parte del propósito, aunque no se tenga que renunciar al placer. De hecho, cuando las personas encuentran formas de disfrutar de comportamientos saludables, son más fáciles de mantener.

En Koa Health, incluimos un tercer elemento que es una parte clave de la felicidad: controlar nuestros asuntos también es un aspecto crucial de la felicidad, es decir, una parte de aquello en lo que se enfocan los humanos.

Bienestar y sociedad

Además, también debemos tener en cuenta que no estamos aislados; nuestro bienestar y felicidad afectan, y mucho, a quienes nos rodean y viceversa. Sin embargo, a efectos prácticos, tenemos una capacidad muy limitada para comprender lo que hace el resto del mundo y cómo eso afecta al bienestar de nuestros clientes. Por lo tanto, hemos optado por centrarnos en los daños sociales en general y cómo pueden afectar al bienestar de nuestros clientes.

Para comprender estos daños sociales, hemos recurrido a la Declaración Universal de Derechos Humanos y al Convenio Europeo de Derechos Humanos. En nuestra opinión, hay muchos derechos que no son relevantes para nuestro trabajo, como el derecho a la vida y la libertad, el derecho a un juicio justo, etc. En cambio, creemos que hay dos daños principales a los que debemos prestar atención: socavar la privacidad (art.12 de la DUDH y art. 8 del CEDH) - a través del nivel de datos que recopilamos; y discriminar a las personas por motivos de género, raza, etc. (art.7 de la DUDH y art. 14 del CEDH) - porque nuestros productos podrían hacer recomendaciones sesgadas en contra de uno o más grupos, creando un servicio menos eficaz y minando la igualdad.

En conjunto, el estado de salud, el placer, el propósito y el control, constituyen buena parte de lo que significa ayudar a las personas a gestionar su bienestar, mucho más que si nos basamos únicamente en las medidas tradicionales del estado de salud de un individuo. Así, evitar estos daños sociales nos permite explicar el contexto más amplio en el que todos vivimos nuestras vidas.

Relación entre ética y confianza

Sin embargo, lograr todos estos factores no equivale a ser éticos ni de confianza, por lo que debemos pasar a definir estos términos³:

Ética: el estudio de lo que está moralmente⁴ bien y lo que está mal, o un conjunto de creencias sobre lo que es moralmente correcto e incorrecto.

Confianza: creer que una persona es buena y honesta y que no nos hará daño, o que algo es seguro y fiable.

Por lo tanto, la ética está estrechamente relacionada con la confianza, pero no es suficiente para garantizarla, ya que no habla de fiabilidad y seguridad. Es interesante ver que la confianza en un objeto o herramienta está relacionada con la seguridad y la fiabilidad, pero no necesariamente con la bondad o la honestidad. Por lo general, no atribuimos una ética concreta a las cosas.

Pero esto está cambiando en el caso de las herramientas con toma de decisiones automatizada, que parecen estar entrando en un territorio que pertenecía exclusivamente a los humanos. Por eso es necesario tener en cuenta las dimensiones éticas a la hora de desarrollar e implementar estas herramientas.

Para comprender cómo alcanzar nuestro objetivo sin dejar de lado la ética y la confianza, nos hemos basado en unos marcos éticos desarrollados por varias organizaciones (consultar el apéndice, para conocer la descripción general de los marcos que hemos tenido en cuenta).

Nuestros propios principios éticos son fruto de este análisis y abarcan tanto la ética como la confianza. Sin embargo, seguimos describiéndolos como un marco ético, en línea con la práctica común.

Más información sobre la ética en Koa Health

Principios y compromisos éticos de Koa Health

Plan de ejecución de estrategia ética de Koa Health

Marco de gobernanza de la estrategia ética de Koa Health